
Río Blanco , Ver.- Con un ambiente colmado de fe, devoción y festivo, la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús ha celebrado los 350 años de la revelación de esta advocación a santa Margarita María de Alacoque.
El templo lució bellamente adornado con un tapete aéreo elaborado por las tejedoras del municipio vecino de Acultzingo, un tapete artesanal de aserrín y arena, así como un sinnúmero de veladoras y flores que marcaron la celebración como una de las más emotivas y, en la que cientos de familias católicas atestiguaron la consagración de al menos 800 feligreses, al Sagrado Corazón de Jesús.
El Obispo de Orizaba Eduardo Cervantes Merino presidió la Eucaristía solemne por esta fiesta patronal; concelebraron el párroco Helkyn Enríquez Báez y sacerdotes invitados.