
Río Blanco, Ver.- La elección de integrantes del Poder Judicial, celebrada recientemente, generó una ola de inconformidades entre la ciudadanía debido al formato utilizado, el cual fue considerado poco práctico, tardado y carente de información sobre los aspirantes.
El proceso exigió a cada votante llenar 10 boletas, una por cada cargo en disputa. Esta medida, lejos de facilitar el ejercicio democrático, generó retrasos, largas filas y confusión entre los electores, quienes además señalaron la ausencia de campañas de difusión para conocer a los candidatos.
La situación fue más complicada para los adultos mayores, quienes en muchos casos necesitaron asistencia constante por parte del personal de casilla. El diseño del formato, según señalaron, no fue pensado para facilitar su participación.
El llenado de estas boletas, la mayoría fue al azar o canceladas con un tache.